.

jueves, 18 de julio de 2024

Las dos pinturas del siglo XIX más famosas sobre el paleolítico


"Dos madres", por Léon Maxime Faivre. Francia, 1888


En el siglo XIX, el mundo del arte experimentó un renovado interés por el patrimonio cultural de la prehistoria. Dos obras en particular, creadas durante este período, se han convertido en íconos de la representación artística del Paleolítico.



"Dos madres": un retrato de la supervivencia en los albores de la humanidad

En el 1888, el artista francés Léon Maxime Faivre creó una obra que nos transporta a los orígenes de la especie humana. "Dos madres" es un lienzo que nos sumerge en una épica lucha por la supervivencia, donde dos instintos maternales se enfrentan en un escenario primigenio.
En la segunda mitad del siglo XIX, una creciente fascinación por la prehistoria se apoderó del imaginario artístico y científico. Faivre, uno de los pocos especializados en esta temática, aprovechó la oportunidad para plasmar en su obra la tensión dramática que habitaba en aquellos tiempos remotos, donde solo existían dos opciones: cazar o ser cazado.

La composición del cuadro es de una gran riqueza simbólica. En primer plano, una mujer humana, una madre, protege con feroz determinación a sus crías, desafiando a la imponente osa con su cría que se ocultan entre las sombras del fondo. Esta escena evoca no solo la lucha por la supervivencia, sino también las profundas raíces del instinto maternal, que trascienden las diferencias entre las especies.
Algunos han visto en esta obra ecos de las clásicas alegorías de la caridad, personificada en los niños que la madre humana defiende con uñas y dientes. Incluso se ha sugerido un posible trasfondo propagandístico, relacionado con el énfasis que la Tercera República francesa puso en la familia como núcleo fundamental de la sociedad.
Sin embargo, más allá de estas posibles interpretaciones, "Dos madres" se erige como un testimonio artístico de una época fundamental en el desarrollo de la humanidad: la prehistoria. Antes de la escritura, este vasto período de la historia solo puede ser reconstruido a través de la especulación y la interdisciplinariedad entre el arte y la ciencia.
En este sentido, la obra de Faivre se convierte en una ventana a ese mundo desconocido, donde el instinto de supervivencia y la protección de la prole eran verdaderas cuestiones de vida o muerte. La tensión dramática que impregna el lienzo nos invita a reflexionar sobre nuestros orígenes más profundos, a reconocer en esas dos madres luchadoras los ecos de nuestra propia herencia evolutiva.
"Dos madres" es una pieza fundamental en la exploración artística de la prehistoria. A través de su potente lenguaje visual, Faivre nos transporta a un tiempo remoto, donde la lucha por la supervivencia era la ley suprema, y el amor maternal, la fuerza que permitía a las especies afrontar los desafíos de un mundo salvaje e implacable.




Faivre exploró los paisajes, retratos, naturalezas muertas y demás géneros pictóricos, pero es conocido sobre todo escenas históricas, donde pinta la historia en su faceta más amplia. Sus pinturas muestran su interés por la antropología, ya que en ellas Faivre reimagina la vida del ser humano prehistórico y su épica. Y hay que decir que nos son Los Picapiedra. Todo parece muy verosímil.


En este detalle ampliado se aprecia -abajo a la izquierda- a una osa con su osezno avanzando amenazadoramente. 



"Hombre prehistórico cazando osos", de Emmanuel Michel Benner (1836-1896). Creo que el título adecuado sería "Defendiéndose de un oso", ya que se puede apreciar que la familia está a la entrada de su cueva-hogar y que el oso los está por atacar.


La pintura "Hombre prehistórico cazando osos", del artista francés Emmanuel Michel Benner (1836-1896), es una obra que nos transporta a un momento clave en la historia de la humanidad: la vida de los seres humanos en la prehistoria. En esta destacada obra, Benner nos ofrece una instantánea cautivadora de una escena que bien pudo haber tenido lugar miles de años atrás.
La composición de la pintura es sumamente rica y detallada. En el centro de la escena, se encuentra un hombre musculoso y decidido, empuñando un arco y flechas, listo para enfrentar a un oso que emerge desde la espesura del bosque. La tensión y el peligro se palpan en el aire, mientras el hombre se prepara para hacer uso de sus habilidades de caza para proteger a su comunidad.
Acompañando al cazador, se encuentran otros miembros de su grupo: una mujer de cabello rojo que sostiene una maza, un bebé que gatea en el suelo y un anciano arrodillado. Todos ellos observan atentos la escena, conscientes de la importancia del momento y de la necesidad de actuar con cautela y destreza.
La elección de los personajes y sus roles en la escena es significativa. La mujer y el anciano representan la sabiduría y la experiencia acumuladas a lo largo de generaciones, mientras que el bebé simboliza el futuro y la esperanza de la tribu. Juntos, conforman una unidad familiar y comunitaria, unidos en la lucha por la supervivencia.
La paleta de colores utilizada por Benner transmite una sensación de autenticidad y realismo. Los tonos cálidos y terrosos predominan, evocando el entorno natural y la rudeza de la vida en la prehistoria. Los detalles en la vestimenta y los rasgos faciales de los personajes han sido cuidadosamente plasmados, brindando una imagen vívida y convincente de lo que pudo haber sido la existencia de estos seres humanos ancestrales.
En conjunto, la pintura "Hombre prehistórico cazando osos" de Emmanuel Michel Benner es una obra que nos invita a reflexionar sobre nuestros orígenes y a valorar la lucha y la resiliencia de nuestros antepasados. A través de esta representación, el artista nos acerca a un mundo distante en el tiempo, pero que sigue resonando en nuestra propia condición humana.


Emmanuel Michel Benner (1836-1896), francés. Es un pintor figurativo, que se destaca, especialmente por la calidad de sus desnudos. Formado con su padre, el pintor Jean Benner-Fries y con León Bonnat, ha trabajado, en un estilo neoclásico, sobre temas históricos, mitológicos y escenas de género. 


VER TAMBIÉN:

Primeros ilustradores de la Prehistoria.

No hay comentarios:

Publicar un comentario