Los griegos sabían crear historias. El mito de Pandora comienza en el momento en el que Zeus le entrega una caja para que se la lleve a Epimeteo. Dentro de la caja se encontraban todos los males existentes y tenía la prohibición de abrirla bajo ninguna circunstancia.
Pandora tenía una gran curiosidad y finalmente no pudo resistir la tentación y en ese momento todos los males se escaparon y se alojaron entre el género humano. Sin embargo, Pandora reaccionó y cerró la caja, pero solamente pudo dejar un elemento sin escapar, la esperanza.
De esta forma nace el dicho: "La esperanza es lo último que se pierde".
Seguro que a muchos les suena esta otra expresión también muy famosa, la de “abrir la caja de Pandora”, y quizá han oído alguna vez el mito de Pandora. Vamos a recordarlo para quienes no lo conocen. Pandora fue según la mitología griega la primera mujer que fue modelada en barro por Zeus
Zeus restaba muy molesto con Prometeo, porque se hizo amigo de los hombres y les quiso ayudar dándoles el fuego, algo que Zeus les había prohibido. Fue tal el enojo de Zeus que ordenó modelar en barro a Pandora y se la mandó a los hombres. Pandora era una doncella encantadora, sensual, tenía todos los dones, pero Zeus sembró en su ánimo las mentiras y un carácter inconstante…
A partir de aquí hay distintas versiones; en algunas, simplemente es Pandora la que trae todos los males y desgracias al mundo, en el que hasta ese momento los hombres vivían tranquilos y felices, libres de fatigas y enfermedades.
Pero en otras versiones ya aparece la caja, la famosa caja de Pandora, aunque su contenido también cambia según la versión. La más conocida dice que los dioses le regalaron esta caja a Pandora, con las instrucciones de no abrirla bajo ningún concepto.
Total, que pasó lo que tenía que pasar: como Pandora era muy curiosa (que parece que esto en una mujer es algo malo, según el mito), pues claro, la curiosidad le pudo, y la abrió. Y al abrirla se escaparon todos los males y desgracias de la humanidad: la enfermedad, la fatiga, la locura, el vicio, la pasión, la tristeza, el crimen y la vejez.
Cuando Pandora se dio cuenta de su error, la cerró rápido, pero lo único que quedó allí fue la esperanza, que es lo único que les quedó a los hombres para soportar tantas catástrofes y desdichas.
En otras versiones del mito la caja estaba llena de virtudes, que se escapaban volando y la única que quedaba antes de cerrar, era la esperanza… esto puede parecer que tiene más sentido, porque sí no, por qué estaba ahí la esperanza mezclada “con todos los males”.
Pero hay quien le ve la lógica; algunos argumentan que en realidad la esperanza era otro mal, porque la esperanza denota carencia y pasividad… Total, que hay versiones para todos los gustos. El caso es que aquí la culpable parece Pandora, cuando en realidad el que había robado el fuego para dárselo a los hombres fue Prometeo, y el vengativo era Zeus, pero, al final la mala ella…
En cualquier caso, parece que de aquí viene la expresión de que “la esperanza es lo último que se pierde” Yo soy más de los que piensa que la esperanza es una algo bueno y no “un mal”. De hecho, si entendemos las esperanza como la capacidad de no dejarse llevar por el derrotismo ante los contratiempos y dificultades, se ha visto que las personas esperanzadas experimentan menos ansiedad, menos depresión y en general menos tensiones emocionales. Como contratiempos y dificultades nos vamos a encontrar todos muchas veces, más nos vale no perder nunca la esperanza, porque cuando la perdemos se vuelve todo mucho más complicado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario