El escritor y guionista paraguayo Robin Wood, autor de series para historietas como "Nippur de Lagash", "Dago" y "Pepe Sánchez" -algunos de los tantos títulos en que se ramifica su producción de 95 personajes y 10.000 guiones.
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El guionista creó a más de 95 personajes y escribió más de diez mil guiones de historietas, muchas de ellas con seudónimos para que su nombre no se repitiera en las publicaciones: Mateo Fussari, Robert O’Neill, Noel Mc Leod, Roberto Monti, Joe Trigger, Carlos Ruiz y Cristina Rudlinger, fueron algunos de ellos.
Wood publicó, entre 1966 y 1997, unas 30 obras con diferentes dibujantes de Argentina. Durante su carrera recibió numerosas distinciones, y la más destacada fue la de "Mejor Guionista del Mundo", en la Bienal de Córdoba, en 1997.
Wood falleció a los 77 años. Había nacido el 24 de enero de 1944 en Caazapá, a 205 kilómetros al sur de Asunción del Paraguay, y desde muy joven se dedicó a la escritura, a pesar de que apenas había terminado el ciclo primario de enseñanza debido a las dificultades económicas de la familia. Sus abuelos eran australianos y militantes socialistas que tuvieron que emigrar de su país luego de una huelga de esquiladores.
A comienzos de la década de 1950, se radicó en Buenos Aires con su madre y trabajó para editoriales argentinas que publicaron sus creaciones en prestigiosas revistas, como El Tony, D'Artagnan, Intervalo y otras.
Robin Wood vivió en Argentina donde realizó varias de sus creaciones.
"Nippur de Lagash" fue un personaje sumerio que Wood inventó tomando como referencia las ciudades de Nippur, donde nacieron sus padres, y Lagash, ambas ubicadas en una zona histórica de Oriente Medio, en el sur de la antigua Mesopotamia, entre los ríos Éufrates y Tigris.
Conocida la noticia, las redes se llenaron de mensajes de despedida. "No hay duda: prolífico autor, talentoso, popular. Deja huella para siempre en el mundo del cómic. Un abrazo a sus familiares y amigos", publicó el historietista Horacio Altuna.
El productor, guionista y periodista Axel Kuschevatzky sumó su despedida: "Adiós Robin Wood. Gracias por tanto. Nippur, Gilgamesh, Dago, Savarese pero por sobre todas las cosas Pepe Sánchez, mi favorito del mundo Columba", escribió.
Por su parte, la cuenta especializada en historieta Archivo de Humor Gráfico Argentino calificó a la noticia como algo "devastador" y recomendó la biografía "Robin Wood: una vida de aventuras", de Diego Accorsi, Julio Neveleff, Leandro Paolini Somers.
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Robin Wood ha dejado un gran legado de historias y de personajes. Y su propia historia, comparable a las historias de sus personajes. Justificando que su biografía se titule "Robin Wood, una vida de aventuras".
ResponderEliminarPor una tradición familiar, Robin Wood fue elegido para ser el bardo, el narrador de historias de su generación. Y efectivamente, se convirtió en un narrador de grandes historias.
Lo que empezó al conocer a Lucho Oliviera, un conocedor y entusiasta de la historia sumeria.
Y así nació Nippur de Lagash, un éxito de la editorial Columba.
EliminarEl nombre del guionista estaba en la revista, pero no se creía que fuera real, sino un pseudónimo usado por Lucho Olivera.
Robin Wood se enteró por casualidad de que su historia había sido publicada. Y un día de lluvia caminó por la editorial, no tenía dinero para pagar el colectivo, donde se presentó como el guionista. Teniendo que presentar su documento para que le creyeran que su nombre era real.
Y así comenzó una carrera gloriosa y sus viajes el mundo, llegando a casarse con una mujer danesa.
Otra obra maestra de la dupla es Gilgamesh el Inmortal, basada en la más antigua historia escrita del mundo, hallada en una tabla de arcilla en Sumeria.
Gilgamesh el personaje que a lo largo de lo siglos es el protector de la humanidad. Tarea titánica aun para un inmortal, con una humanidad que no aprende, cometiendo los mismos errores. Y podría decirse que tampoco aprende Gilgames, porque a pesar de su experiencia de siglos sigue teniendo esperanza en la humanidad.
Otro personaje que puede mencionarse es Mark, protagonista de la historia homónima, ambientada en un mundo post apocalíptico, con una humanidad intentando sobrevivir a pesar de los mutantes, que no siempre son los villanos de la historieta.
Podría decirse que Mark tiene una hermana llamada Danske (su nombre quiere decir danesa). Una amazona de un mundo distópico habitados por mutantes, que esta vez no son el poder dominante, sino sobrevivientes que a veces son los villanos, otras veces no lo son, sólo quieren sobrevivir.
Danske es una heroína de acción, con astucia y capacidad de liderazgo, capaz de promover alianzas entre grupos aparentemente irreconciliables. Y puede decirse que las historias tratan de que en ese mundo de conflictos, de sobrevivientes a una gran catástrofe, se puede tener esperanza, expectativas de que puede esperarse un mejor futuro. Un gran regalo en épocas de reales distopías.
Y es parte del legado que nos ha dejado Robin Wood.
EliminarGracias Demiurgo, no esperaba menos de ti.
ResponderEliminarÉpico. Es la mejor forma de definirlo. Podía escribir con la misma intensidad y calidad sobre el Génesis (Or-Grund), el fin del mundo (Mark), la eternidad (Gilgamesh), aventuras de todo tipo (Jackaroe, Dennis Martin, Chindits y tantas) como por un romance sencillo de barrio (Mi novia y yo, y la impresionante primera entrega de Helena). Si le habré robado el Intervalo a mi vieja, y leído de garrón en el kiosko de Juan Carlos, en la esquina de Nazca y Nogoyá, en Buenos Aires...
ResponderEliminarCon sus historias aprendimos muchísima historia, geografía y filosofía, pero sobre todo le tomamos el gusto a la lectura. Creo que anda por acá, y si no se puede encontrar en Google, una extraordinaria historia que escribió para el Ministerio de Educación de Paraguay por los 200 años de independencia, que se llama justamente "1811". Y no olvidemos que el Vaticano lo premió por uno de los capítulos de Gilgamesh llamado "El Nazareno", y hasta lo declararon "El mejor guionista del mundo". Dago está en una categoría propia.
¡Gracias por tanto, Maestro! Y hasta el próximo número...
Fantasía, aventura, ciencia ficción, comedia, romance, humor...en todos los géneros de la historieta en los que incursionó su talento brilló con luz propia. Gracias por tanto trabajo y descansa en paz.
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