Una perfecta aleación de contemporaneidad y clasicismo.
Dotada de un sentido del humor envidiable, Anita Arbidane (Letonia, 1983) reconvierte las provocadoras temáticas de sus pinturas en ocurrentes situaciones con el ingenio que la caracteriza. Fusiona, con un punto irónico, la belleza y lo grotesco, al tiempo que combina personajes clásicos, situaciones de reminiscencia clásicas con una estética contemporánea, los mezcla de tal forma que traspasa los límites de cada época.
Delicadas y mordaces escenas de sofisticados personajes, manos perfectamente colocadas que solo encontraremos en las más refinadas élites realizando actos tan cotidianos como comer o darse un baño. Protagonistas con los que el espectador puede relacionarse y, al mismo tiempo, resolver la intriga que parece esconderse en cada escena.
Una pintura realista impregnada de miradas comprometedoras, protagonistas que no dejan indiferente al espectador, siempre trasmitiendo un poco de sí mismas, siempre descubriéndose, solo en parte, ante el observador. (Fuente)
Muy acertado tu comentario, y muy bellas obras. Veré si encuentro algo más en la red, me gustó el estilo.
ResponderEliminarMuchas gracias, pero el texto no es mío.
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