La cultura de la Antigua Grecia, también conocida como la Grecia Antigua o la Grecia Clásica, es la llamada cuna de la Civilización Occidental: fue una de las culturas de mayor influencia e importancia en la antigüedad mediterránea. Su centro se hallaba la antigua ciudad-Estado de Atenas.
Gran parte de esta cultura sobrevive hoy en día. De hecho, ha influido fuertemente numerosos aspectos de la cultura occidental: el imaginario, la política, la lengua, las artes, la filosofía, las ciencias y los sistemas educativos.
Su importancia actual se debe no sólo a la riqueza de pensamiento y a la naturaleza expansionista de los griegos, sino también a su posterior conquista y asimilación por el Imperio Romano en el siglo II a. C.
Cualquiera que haya tenido un acercamiento a la vasta mitología griega o a los pensadores fundamentales que legaron a la humanidad, como Sócrates, Platón y Aristóteles, entre muchísimos más, puede hacerse una idea de la importancia de esta civilización antigua.
Esta cultura estuvo prácticamente prohibida y silenciada durante los 1500 años de medioevo cristiano, tildada de pagana. Sin embargo, mucho de ella sobrevivió en el Imperio Bizantino (o Imperio Romano de Oriente), hasta su caída frente a los Otomanos. De hecho, su reaparición en Occidente ocurrió durante el Renacimiento europeo de los siglos XV y XVI. (Fuente)