El 20 de mayo de 1990, el grupo de rock chileno Los Prisioneros lanzan su cuarto álbum, titulado Corazones, siendo el más exitoso de su carrera al ser un éxito en toda América Latina y Estados Unidos.
Corazones es el cuarto álbum de la banda chilena Los Prisioneros, lanzado en 1990. Producido por el argentino Gustavo Santaolalla, en conjunto con Aníbal Kerpel para EMI Odeón Chilena, fue grabado, mezclado y masterizado en Los Ángeles, California. En el extranjero, la distribución del álbum estuvo a cargo de Capitol Records.
En abril de 2008 ocupó el noveno puesto en la lista de los 50 mejores discos chilenos de todos los tiempos, según la edición chilena de la revista Rolling Stone. Siendo así, comparte un lugar destacado en la historia musical de Chile junto a otros dos discos de la banda: La voz de los '80 (posicionada en el tercer lugar), y Pateando piedras (en el décimo quinto). En 2011 fue remasterizado junto con La cultura de la basura, Pateando piedras y La voz de los '80. (W)
En plena invasión rusa, la banda ucraniana Kalush Orchestra y su tema “Stefania” se impuso en el popular certamen de música, por sobre el Reino Unido, que se quedó con el segundo lugar, y España, con el tercero.
Justo tras su actuación, Kalush Orchestra ha reclamado “ayuda” para su país, para la ciudad de Mariupol y para los soldados atrincherados en la acería de Azovstal, un mensaje que por su naturaleza política está prohibido en principio en las normas del festival, aunque la organización de momento no se ha pronunciado sobre sus consecuencias.
Stefania
Stefania madre, madre Stefania
El campo florece, tu cabello se vuelve gris
Mamá, cántame una canción de cuna
Quiero escuchar tus palabras de consuelo
Cuando yo era bebé, ella me mecía y me daba ritmo
Creo que no podrán quitarme la fuerza de voluntad, porque me ha dado
Creo que ella era más sabía que Salomón
Siempre volveré a ti, incluso con todos los caminos rotos
Ella no me despertará, no me despertará, incluso con tormentas
Incluso cuando la abuela te tira cosas, como balas
Ella me conoce muy bien y no se equivocó
Incluso cuando estaba cansada, seguía meciéndome
Ea la nana, ea la nana
Stefania madre, madre Stefania
El campo florece, tu cabello se vuelve gris
Mamá, cántame una canción de cuna
Quiero escuchar tus palabras de consuelo
Ya no soy un bebé, ma-oh-ma-oh, está bien
Aun así, sigue cuidándome como si fuera
Ya no soy un niño, pero ella sigue preocupándose
Corro, ella me maldice: Te voy a pegar
Mamá, todavía eres joven, estás en tu mejor momento
Si no aprecio tu amabilidad, estoy en un callejón sin salida
Allá, aquí, ahí arriba, en todas partes, mi amor por ti no tiene fin
A los 67 años, George Pérez falleció producto del cáncer terminal de páncreas que padecía desde el año pasado.
El reconocido dibujante es autor de clásicos retratos de Marvel y DC y su deceso fue informado por a través de Twitter por sus familiares: "todos estamos de duelo pero, al mismo tiempo, estamos increíblemente agradecidos de la alegría que (George) trajo a nuestras vidas. Conocer a George era amarlo y él amaba de vuelta. Ferozmente y con todo su corazón. El mundo es mucho menos vibrante sin él hoy".
"Todos conocen el legado de George como creador. Su arte, sus personajes e historias serán recordadas por años. Pero, tan importante como es ese legado, palidece en comparación al legado del hombre que George fue. El verdadero legado de George fue su amabilidad. Es el amor que tenía por darle felicidad a otros.- y espero que ustedes lleven eso consigo siempre", agregaron.
El desastre del Hindenburg ocurrió el 6 de mayo de 1937, cuando el dirigible de pasajeros alemán LZ 129 Hindenburg se incendió y fue destruido durante un intento de aterrizaje en la Estación de Aire Naval Lakehurst en Mánchester Township, New Jersey, Estados Unidos. De las 97 personas a bordo (36 pasajeros y 61 tripulantes), hubo 35 muertes (13 pasajeros y 22 tripulantes). Un trabajador en tierra también murió, sumando un total de 36 decesos.
El desastre fue ampliamente cubierto en impactantes videos, fotografías y en una crónica radial grabada por Herbert Morrison, testigo del desastre, el cual fue retransmitido al día siguiente. Una variedad de hipótesis han sido propuestas tanto sobre la causa de ignición, así como para el combustible que originó la propagación del fuego. El incidente destrozó la confianza pública en la seguridad de los dirigibles rígidos para pasajeros y marcó el fin repentino de la era del Dirigible. (W)
«She» (en español, Ella) es una canción escrita por Charles Aznavour y Herbert Kretzmer, publicada por Aznavour como sencillo en 1974. Fue compuesta como tema para la serie de televisión británica Seven Faces of Woman.
Alcanzó el primer puesto en el UK Singles Chart, donde se mantuvo durante cuatro semanas consecutivas y obtuvo un disco de plata al superar las 250,000 unidades vendidas. Tras las fronteras de Reino Unido la canción no fue tan popular, si bien llegó a alcanzar el número uno en las listas irlandesas. La canción se grabó, además de en inglés, en francés, italiano, español y alemán.
Elvis Costello grabó una versión de la canción en 1999. Esta versión de la canción fue producida por Trevor Jones.
La versión original de Charles Aznavour fue interpretada en los créditos iniciales de la película Notting Hill, mientras que la versión de Elvis Costello es la que suena al final de la misma.
She
She may be the face I can't forget
A trace of pleasure or regret
May be my treasure the or price I have to pay
She may be the song the summer sings
May be the chill that autumn brings
My be a hundred different things
Within the measure of the day.
She may be the beauty or the beast
May be the famine or the feast
May turn each day into heaven or a hell
She may be the mirror of my dream
A smile reflected in a stream
She may not be what she may seem inside her shell
She who always seems so happy in a crowd
Who's eyes can be so private and so proud
No one's allowed to see them when they cry
She may be the love that cannot hope to last
May come to me from shadows of the past
That I remember till day I die
She may be the reason I survive
The why and where for I'm alive
The one I'll care for through the rough and many years
Me I'll take her laughter and her tears
And make them all my souvenirs
For where she goes I've got to be
The meaning of my life is she, she, she
Ella
Ella puede ser la cara que no consigo olvidar
Un rastro de placer o remordimiento
Puede ser mi tesoro o el precio que tengo que pagar
Ella puede ser la canción que canta el verano
Puede ser el frío que trae el otoño
Puede ser cien cosas diferentes
Mientras pasa el día
Ella puede ser la bella o la bestia
Puede ser la carencia o el banquete
Puede convertir cada día en cielo o en infierno
Ella puede ser el espejo de mi sueño
Una sonrisa reflejada en un arroyo
Ella puede no ser lo que parece dentro de su máscara
Ella quien siempre parece muy feliz dentro de un gentío
Sus ojos pueden ser tan privados y tan orgullosos
A nadie le permitió verlos cuando lloran
Ella puede ser el amor que no puedo esperar que termine
Puede venir a mi desde las sombras del pasado
Que recordaré hasta el día que muera
Ella puede ser la razón para sobrevivir
El por qué y el donde por lo que estoy vivo
A quien yo cuidaré a través de los muchos y ásperos años
Yo tomaré sus risas y sus lágrimas
Y con ellas haré todos mis recuerdos
Por donde ella va yo tengo que estar
El significado de mi vida es ella, ella, ella
Nos vemos el próximo domingo con otra canción que me gusta
«These Boots Are Made for Walkin'» (en español: «Estas botas están hechas para caminar») es una canción clásica del pop de la década de 1960. Fue compuesta por Lee Hazlewood expresamente para la hija de Frank Sinatra, Nancy Sinatra. La canción supuso el mayor éxito de Nancy y ha sido versionada después por múltiples estrellas como Yuna Ito, Amanda Lear, Geri Halliwell o Jessica Simpson. La famosa Madonna admitió que Nancy Sinatra fue una de las estrellas que admiró en su niñez, y que solía bailar esta canción subida a las mesas.
Cuando eres la hija de uno de los grandes cantantes del mundo, se necesita algo más que una buena canción para lograr el éxito. Desafortunadamente, Nancy Sinatra apenas tenía voz, sin mencionar que carecía de material. Su voz austera dejó frío al público consumidor de discos, y ni siquiera la influencia de su padre (ella había firmado con su sello discográfico, Reprise) pudo hacer un éxito con ninguno de sus primeros lanzamientos.
Pero en 1965, el director de talentos de Reprise, Jimmy Bowen, la entregó a Lee Hazlewood, nacido en Texas, un compositor y productor inconformista y el creador del estilo twang de tocar la guitarra que Duane Eddy hizo famoso. Para los oídos de Hazlewood, el lúgubre zumbido de Nancy irradiaba una astuta sexualidad.
Resultó una pareja fructífera: solamente en 1966 hicieron cuatro álbumes juntos. Durante una de las primeras sesiones, Hazlewood y su equipo estaban pasando tiempo de ocio en el de estudio con "viejas canciones leperas de Texas", según cuenta el productor. Nancy, una niña pulcra de Nueva Jersey, no había oído nada parecido. Cuando su mandíbula cayó, los ojos de Hazlewood brillaron: “Dije, ‘Oh, tengo una idea. Dame la guitarra’”. Rasgueó algo en lo que había estado trabajando, una melodia irresistiblemente pegadiza: “These boots are made for walkin’, and that’s just what they’ll do/ One of these days these boots are gonna walk all over you”. Nancy dio una amplia sonrisa, sabía que era la canción para ella. Sin embargo, consciente de para quién trabajaba, Hazlewood se mostró renuente en enseñarle los coloquialismos groseros de la canción, específicamente en el verso: "You’ve been messin’ where you shouldn’t have been a-messin’", un eufemismo descarado en inglés para el sexo. Pero a Nancy no le podría haber importado menos y, como resultado, Frank estaba encantado.
La clave de la canción es una línea de bajo descendiente siniestra, como los escalones de un sótano oscuro, interpretada por Chuck Berghofer en contrabajo y Carol Kaye en bajo eléctrico. Hazlewood le dio una, ahora famosa, indicación a Nancy para que la cantara "como una niña de 14 años que sostiene relaciones carnales con camioneros". La canción avanzó en las listas de éxitos de todo el mundo y transformó la imagen de Nancy de niña de papá a gatita sexual. (F)
Estas botas están hechas para caminar
Sigues diciendo que tienes algo para mí
Algo que llamas amor pero confiesas
Has estado jugando donde no deberías haber estado jugando
Y ahora alguien más está sacando lo mejor de ti
Estas botas están hechas para caminar
y eso es justo lo que harán.
Uno de estos días estas botas te van a pasar por encima.
Ya .
Sigues mintiendo cuando deberías decir la verdad
Y sigues perdiendo cuando no deberías apostar
Sigues diciendo cuando deberías estar cambiando
Ahora lo que está bien está bien, pero aún no has estado en lo correcto
Estas botas están hechas para caminar
y eso es justo lo que harán.
Uno de estos días estas botas te pisotearán.
Sigues jugando donde no deberías estar jugando Y sigues pensando que
nunca te quemarás (ja)
Acabo de encontrarme una nueva caja de fósforos, sí
aprender
Estas botas están hechas para caminar
Y eso es justo lo que harán
Uno de estos días estas botas caminarán sobre ti.
Nos vemos el próximo domingo con otra canción que me gusta
Los errores en el despliegue militar y su logística y la intensidad de la resistencia ucraniana han impedido la victoria relámpago que buscaban los generales de Putin y que daba por hecha la propaganda rusa.
Todo ejército inicia una ofensiva con una cantidad determinada de munición, combustible y comida. La labor de la logística es conseguir que esas unidades puedan continuar su movimiento recibiendo de forma periódica los suministros necesarios. En muchas ocasiones, eso no es posible, bien por errores propios o por la respuesta del enemigo. A partir de ese momento, empieza la cuenta atrás. Cada día que pasa se acerca el instante en que ese ejército no pueda avanzar más o ni siquiera mantener sus posiciones, y eso sin contar con que los soldados terminen cayendo exhaustos después de varias semanas de combates.
Esta realidad fue enunciada por Carl von Clausewitz. Antes Napoleón la había expresado en innumerables frases con su obsesión por que los soldados contaran con calzado apropiado y comida suficiente. Cuando no lo consiguió, pagó un precio muy alto. Lo mismo le ocurrió a Rommel. Sus problemas con el combustible fueron el mejor aliado de los británicos en el norte de África.
Es lo que le ha terminado ocurriendo al Ejército ruso en su primer mes tras el comienzo de la invasión de Ucrania. Y por encima de ello, un hecho difícil de refutar. No ocupas un país tan grande como ese con 150.000-200.000 soldados. No son suficientes a menos que el enemigo se venga abajo. Los manuales militares indican que se necesitan al menos cinco soldados por cada defensor de una posición. Si se trata de combates urbanos en una ciudad, la ratio tiene que ser mayor.
En un intento de presentar como una decisión prevista desde el inicio lo que es un paso forzado por las circunstancias, el alto mando militar ruso anunció el pasado viernes que había cumplido sus planes iniciales y que pasaba a centrarse en “el objetivo principal” de la misión: obtener el control del Donbás, en la zona oriental de Ucrania.