Huyendo de la violencia doméstica y la soledad urbana, Manu, Julie y Anna, tres menores de edad con tendencias suicidas, se refugian en una casa en el bosque. Al fondo de la bodega hay un menhir con la inscripción ‘‘Puerta al Cielo’’. Este es el lugar donde se puede hablar con los muertos…
Pierre Makyo y Eugenio Sicomoro nos regalan un thriller con tintes fantásticos ambientado en la campiña francesa, un ambiente cerrado en el que nada es lo que parece.
Un rompecabezas que se va resolviendo gradualmente y que gira en torno a temas eternos como el vacío existencial, la ausencia y la soledad compartida.





























































El arte es funcional a la historia, que está bien planteada.
ResponderEliminarEs irregular la fuga de tres adolescentes pero ellas tienen argumentos para eso.
Incluso funciona el cliché de que una se parezca a la hija perdida de un pintor.
Hay personajes bien desarrollados.
Un buen comienzo.