El 17 de abril de 2011 se emitió el primer capítulo de Juego de Tronos. Poco después del estreno de la serie publiqué esta breve nota que aun tiene actualidad.
Daenerys es la favorita del público en la serie televisiva Juego de Tronos. Es la última de su familia, los Targaryen, que alguna vez gobernaron Westeros pero fueron derrocados luego de que uno de ellos se volviera loco de poder. Con la habilidad de comandar tres dragones, la joven ha comenzado de a poco una revolución para sentarse en el Trono de Hierro, pero las cosas se complicaron la temporada anterior. Sus mismos súbditos se alzaron contra ella y debió escapar de su ciudad, Meereen, para luego ser raptada por los Dothraki, una tribu de guerreros que no conocen las camisas. A su favor está que ya los comandó una vez, cuando su líder era su fallecido marido, Khal Drogo.
Daenerys heredó todos los típicos rasgos de la Casa Targaryen, el cabello rubio platino y los ojos color violeta, poseyendo una figura esbelta y siendo descrita como una mujer muy hermosa.
Respecto a su carácter, la personalidad de Daenerys es una de las que más evoluciona a lo largo de toda la saga. Al principio podemos verla como una muchacha asustadiza, retraída y sensible, que siente miedo por su hermano mayor y temerosa de lo que su matrimonio con Khal Drogo pudiera deparar, pero según toma conciencia de su cargo como Khaleesi de los dothraki y va superando penalidades, Daenerys adquiere una personalidad mucho más decidida, audaz y valerosa. Uno de sus principales consejeros, Ser Barristan Selmy, afirma que ella tiene la auténtica personalidad de una reina. Por otro lado, también es una persona que se deja llevar mucho por sus sentimientos y parece demostrar tener una gran necesidad de aceptación, sintiéndose una especie de "figura mesiánica".
Además de su inocente y élfica belleza, quizá sea uno de los personajes que más simpatía despierta de la exitosa serie.
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Emilia Clarke, reconocida por su emblemático papel de Daenerys Targaryen en la serie "Juego de tronos", reafirmó su postura sobre las escenas de desnudo en la producción. En el episodio de la sexta temporada, caracterizado por su intensa narrativa y giros dramáticos, Clarke volvió a aparecer sin ropa, lo que generó tanto atención como especulación en torno a su compromiso con el rol. En declaraciones a la revista 'Entertainment Weekly', la actriz enfatizó que aquellas imágenes son auténticamente su cuerpo, sin dobles involucrados. Clarke, quien ha abordado la desnudez con naturalidad, señaló que esa experiencia fue más controlada gracias al rodaje en un plató cerrado, permitiéndole así una mayor comodidad y confianza durante la filmación.
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La temporada final fue un desastre, que destrozó todo el desarrollo que había tenido Daenerys como personaje.
ResponderEliminarPero no es la culpa de Emilia Clarke, para nada. Sino de quienes tomaron esas decisiones tan equivocadas sobre la serie.
Se nota el talento de la actriz en el personaje, su evolución, todos los matices en sus expresiones. Era la adecuada para mostrar esa belleza élfica, buena definición.
Y llevó esa compromiso como actriz, con ese tema de los desnudos, al que otras actrices suelen negarse.
Interesante entrada.
Gracias por tu aporte. Salvo algunos capítulos aislados la serie no la seguí. "Belleza élfica", buena definición.
EliminarIgual me resulta un misterio esa profunda atracción que sentimos por el desnudo y la belleza. No pasa lo mismo si la persona por desnudarse no reúne las condiciones mínimas de proporcionalidad. Es como el inicio del poema de Vinicius de Moraes: "Receta de mujer":
ResponderEliminar"Las muy feas que me perdonen
Mas la belleza es fundamental. Es preciso
que haya en todo eso algo de flor..."