miércoles, 15 de marzo de 2023

El Príncipe de las tinieblas


El Príncipe de las Tinieblas es una de esas obras que te sorprenden, especialmente a quienes no conozcan el trabajo de Igor Kordey y Jean Pierre Pecau.

Por José Ramón Alvarez García

Estamos ante una obra atractiva, primero por los autores, de los cuales ya hemos reseñado obras como Imperio o Marshall Bass y en segundo lugar, por lo atractivo de la temática, y es que estamos hablando de un punto de inflexión en la historia contemporánea, como fue el atentado de las Torres Gemelas.

El contexto

Siempre es aconsejable contextualizar lo que leemos, en este caso, es relativamente sencillo, pero conviene advertir que El Príncipe de las Tinieblas está originalmente publicado dentro de la colección francesa Le Jour.

Estamos ante una serie de álbumes creados por Jean Pierre Pécau, Fred Duval y Fred Blanchar en donde se nos plantean situaciones alternativas a la realidad histórica que conocemos.

Dentro de esta serie tenemos situaciones del tipo de si Colon hubiera descubierto América para el mundo árabe, Kennedy no hubiese ganado las elecciones, o situaciones alternativas a los hechos acontecidos en la II Guerra Mundial.

Podríamos imaginar una Francia liberada por los rusos, o unos acontecimientos enmarcados en la Guerra Fría como que los rusos hubiesen llegado antes a la luna.

Todo esto da un sinfín de posibilidades a los guionistas. Resumiendo, estamos ante un What if .. ? a la europea pero en mi humilde opinión mejor logrado, ya que la documentación es impresionante y las tramas están muy bien hiladas.

Argumento

La situación que nos plantea esta historia, distribuida a lo largo de tres álbunes de la colección, es la hipótesis de lo que hubiera pasado si se hubiesen evitado los atentados de las Torres Gemelas.

Todo esto hubiera cambiado el curso de la historia tal y como la conocemos.


Los personajes

Como protagonistas de esta historia tenemos a dos personajes reales.

John Patrick O´Neill y Robert Booker Baer.

Además veremos a gente toda clase de dirigentes políticos como Kerry, Bush, Clinton, Mubarak, Arafat, Saddan Hussein y a Bin Laden.

John Patrick O´Neill

Agente de la CIA desde 1975 hasta el 1995 en donde consigue el ascenso como coordinador de la lucha antiterrorista.

John Patrick es conocido por el sobrenombre de El Príncipe de las Tinieblas debido a su forma de vestir, siempre con impecables trajes negros.

A raíz del atentado de 1993 contra el World Trade Center empieza a seguir una serie de pistas en donde se da cuenta de que se repite un modus operandi en atentados posteriores como los ocurridos en Arabia Saudí Tanzania o Yemen.

John Patrick fue una de las víctimas de los atentados del 11 de Septiembre ya que días antes había sido nombrado jefe de seguridad.

La última vez que fue visto con vida estaba coordinando la evacuación de la primera de las torres en caer.

Robert Booker Baer, agente de la CIA que combate el islamismo y llega a participar en la primera Guerra del Golfo.

Deja la CIA por discrepancias ya que es partidario de acabar con el régimen de Sadam Hussein.

Desde entonces trabaja como asesor y escritor.

Hay que dejar claro que pese a usar a dos personajes reales, Jean Pierre Pécau se permite ciertas licencias en el cómic. Veremos situaciones que no se asemejan a lo ocurrido y se deja llevar en parte por la ficción y es que esa es la gracia de este planteamiento.



El planteamiento.

La obra va dando saltos en el tiempo y partimos del año 2004.

John Kerry ha ganado las elecciones y Barack Obama es vicepresidente.

La administración Bush ha llegado a su fin y no ha habido una segunda Guerra del Golfo.

¿ Cómo se ha llegado a esa situación ?

Repartido en tres álbumes, los autores nos irán contando como desde 1993, John Patrick ha ido investigando una serie de pautas que se repiten en diversos atentados contra intereses estadounidenses en territorio árabe.

La tensión vivida en los países árabes, las rivalidades entre facciones religiosas, la influencia de Osama Bin Laden en Arabía, los efectos de guerras anteriores como la de Afganistas o la de Irak contra Irán…

Todo eso y sus consecuencias lo veremos reflejado en esta historia, que pese a ser una ucronía refleja con bastante exactitud la situación política de la zona hasta que cambian el surco real de la historia.

No vamos a destripar nada si decimos que en este cómic se evitan los atentados del 11 de Septiembre, ya que la misma sinópsis de la editorial te lo dice, y en al contraportada vienen unas viñetas bastante explicitas al respecto.



Apartado gráfico.

Tengo que decir que soy un fan de Igor Kordey. En obras como Nosotros los Muertos o Imperio tiene bastantes detalles que recuerdan a Richard Corben. Aquí se le ven menos detalles pero es que estamos ante una obra que se presta menos a inventar cosas.

Lógicamente no vamos a ver escenarios fantásticos ni naves extrañas ni zombis ni cosas de esas.

Si hay que destacar el parecido de los personajes reales, dentro de su estilo característico.

Hay páginas en donde se hace un ejercicio interesante de narración gráfica, ya que carecen de texto pero es que no les hace falta.

También podemos destacar el detalle de que en periódicos o revistas aparezcan fotos reales de los protagonistas.

En mi opinión, siendo un dibujante que me gusta, aquí está por debajo del nivel de las obras mencionadas.


Conclusiones

Estamos ante una obra muy interesante. Primero por el tema que trata, muy dado a diferentes teorias conspiranoicas.

En segundo lugar, me parece un acierto el usar personas reales aunque el autor se permita bastantes licencias respecto al comportamiento de estas.

Además de hacer un análisis geopolítico de la situación en oriente medio bastante acertado, invita al lector a hacerse una serie de cuestiones.

¿ Se podrían haber evitado los atentados del 11S?

¿ Como sería la situación actual en el caso de que no hubiese habido una segunda Guerra del Golfo ?

¿ Interesa que haya guerras ? Y es que las guerras mueven dinero y ese movimiento de dinero beneficia a personas que tal vez están detrás de grupos de poder.

En definitiva, una obra recomendable, aunque el dibujo en esta ocasión no sea su fuerte.



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