lunes, 18 de marzo de 2024

Especial mes de la Mujer: Mujeres pioneras en el mundo del cómic

  • Este no es un homenaje a las grandes damas del cómic actual, sino a aquellas cuyo trabajo en el noveno arte ha servido para que todos estos grandes nombres actuales hayan llegado hasta aquí. Veamos dónde y desde cuándo arranca la cuna de toda esta vocación.
  • Cada vez son más las mujeres que, como autoras, entran en el mundo del cómic. Pero ha habido un largo camino hasta que su trabajo ha llegado a la situación actual. Ya son visibles, ya son reconocidas... pero queda mucho por hacer.




Las pioneras del cómic norteamericano

1. Rose O’Neill
¿Si os digo que la aparición de la primera mujer historietista se remonta a los primeros años de la popularización de la tira cómica?

Se considera popularmente a “The Yellow Kid” como el padre oficial de la historieta actual, y su creador (Richard F. Outcault) lo publicó en 1895. Pues bien, en 1896 Rose O’Neill (1874-1944) publicó en la revista Truth su primera tira cómica dentro de una serie regular: “The old subscriber calls”.


A pesar de su obvio talento, sus primeros trabajos estaban firmados como “CRO” para disfrazar el hecho de que era una ilustradora (se sabe que la C es por su primer nombre, Cecilia, que rara vez usaba. La R es por Rose, obviamente, y la O por su apellido). Todo para ocultar que no era el trabajo de un hombre… lo que cabía esperar de la época, por supuesto. Sus trabajos posteriores estuvieron firmados como “O’Neill”.
Fue completamente autodidacta. En 1888, a los 13 años, Rose ganó un concurso de arte celebrado en el periódico local (el Omaha World Herald), y los jueces la convocaron para demostrar sus habilidades en persona porque no creían que el talento demostrado fuese el de una concursante de 13 años. A partir de entonces, Rose demostró sus habilidades y pudo complementar los ingresos familiares con un trabajo regular en diversos medios impresos.




En 1901 publicó su primer cómic como tal: los Kewpies, pequeños personajes querubines basados ??en su amado hermano menor que había muerto tristemente cuando era un bebé. Fueron recopilados en álbumes en 1934 y se creó una línea de muñecos sobre ellos que se vendió muy bien.


Pero no se detuvo sólo en los cómics: escribía relatos, novelas e ilustraba tanto novelas adultas como cuentos infantiles. También hizo sus pinitos en publicidad y, además, defendió activamente el sufragio femenino.

2. Nell Brinkley

Y de Rose O’Neill saltamos a una joven feminista que llegó a Manhattan en 1907: Nell Brinkley (1886-1944). Fue la primera en reflejar el concepto de “mujer nueva” en una época en la que la representación tópica y típica de la mujer reflejaba una artificial sofisticación al servicio de un aristocrático futuro atadas a feos y viejos hombres adinerados.
Brinkley representó a impresionantes y activas mujeres de clase trabajadora que esquiaban, corrían y surfeaban con aire independiente, y que nunca dejaban que se las casase con la nobleza. Crea lo que se llamó las Brinkley Girls.


En 1918 creó su primer cómic: “Golden Eyes and her hero Bill”, un producto muy feminista para la época.

 El prometido de Golden Eyes, Bill, se va a la guerra y le regala un perro, un Collie llamado Uncle Sam, que es un perro muy listo, al estilo de Lassie o Milú. El perro identifica a un espía en el jardín de la casa de Golden Eyes, lo que la impulsa a unirse a la Cruz Roja y partir a Francia a buscar a su prometido.
Allí es capturada por un oficial alemán que queda prendado de su belleza. Ella juega sus bazas y consigue escapar con los secretos de la ofensiva alemana, rescata a su novio herido, y tanto ella como su perro son condecorados.


  • 3. Ethel Hays

  • Tras la Primera Guerra Mundial, llegan los locos años 20 y las Flappers: un nuevo estilo de vida de mujeres jóvenes que usaban faldas cortas, no llevaban corsé, lucían un corte de cabello especial (denominado bob cut) y escuchaban música no convencional para esa época (charleston, swing, jazz), que también bailaban.

    Y, cómo no, las tiras cómicas se llenaron de este nuevo arquetipo y, de nuevo, una mujer marcó la tendencia en este aspecto: Ethel Hays (1892-1989).

  • Se hizo popular por una tira cómica que empezó a publicar en 1924: Flapper Fannie Says”: cada viñeta presentaba a una flapper dibujada con estilo art deco que lanzaba una agudeza bastante irreverente para la época.

  • En 1930 dejó esta tira en manos de otra pionera: Gladys Parker (1910-1966), que debutó en  prensa con la tira cómica “May and Junie” (1928).


  • Pero fue más conocida por la creación de “Mopsy” (1939), una muchacha inspirada en ella misma: independiente e ingeniosa, aunque algo ingenua. Se publicó hasta 1953, y tuvo las más diversas ocupaciones (ejerció de enfermera y auxiliar durante la II Guerra Mundial). Hasta salieron líneas de recortables.


  • 4. Jackie Ormes

  • Demos ahora un saltito atrás, a 1937, a una tira llamada “Torchy Brown in Dixie to Harlem: ¿Qué tiene de especial? Es obra de Jackie Ormes (1911-1985), la primera dibujante afroamericana publicada.

  • “Dixie to Harlem” cuenta la historia de una joven sureña que abandona su granja para convertirse en cantante y bailarina del prestigioso Cotton Club de Nueva York.

    Tras cesar su publicación en 1940, dibujó dos series más: “Candy”, sobre una criada negra, y “Patty Jo and Ginger”, que tuvo la peculiaridad de convertirse en la primera muñeca negra de vinilo.


  • 5. Tarpe Mills

  • Tampoco el nacimiento de la llamada “Edad de Oro de los cómics” fue ajeno al trabajo de estas aguerridas mujeres: si bien Superman nació en junio de 1938, en 1939 una mujer llamada Tarpe Mills –su nombre real era June Mills– (1918-1988) crea historietas de acción y aventura protagonizadas por mujeres.

  • Entre todas destaca “Miss Fury (1941), la primera protagonista de acción creada por una mujer. Su alter ego era la millonaria Marla Drake. Enfundada en un traje de heroína, se enfrentaba a diversos villanos y mantenía un triángulo amoroso con su exnovio y un detective recurrente en sus historietas.

    Fue revolucionaria por ello y por los considerados reveladores trajes que usaba, que causaron honda controversia. Timely Comics (que, después, se convertiría en Marvel) reimprimió sus cómics de 1942 a 1946.


  • Y vamos a parar aquí, aunque hay otras muchas pioneras: Dale Messick (“Brenda Starr”, “Reporter”, 1940), Jill Elgin (“Girl Commando”), Hilda Terry (“Teena”, 1949), Ruth Atkinson (“Patsy Walker”, 1944), Trina Robbins (“It ain’t me”, “Babe”, 1970)

  • Las pioneras de la BD

  • 1. Claire Bretecher

  • Durante décadas no hubo mujeres en la escena del cómic franco-belga hasta la aparición de la primera de ellas: Claire Bretecher (1940-2020). Debutó de la mano de René Goscinny, dibujando su guion en Le Facteur Rhésus (1962). Durante los siguientes años, publicaría en “Tintín” (1965-66), “Spirou” (1967-71) o “Pilote”, mostrando un estilo muy influenciado por Jean-Marc Reiser.

  • Se hizo conocida por su serie Les Frustrés (1973), que llegaron a ser publicados en España en las páginas de la revista Totem. Se trata de un cómic paródico en el que satiriza a la izquierda acomodada de la que forma parte.

  • En 1976, viendo que no había espacio para la expresión de las mujeres, un grupo de autoras se asociaron para, bajo el amparo de Humanoïdes Associéscrear la revista Ah! Nana: Chantal Montellier, Nicole Claveloux, Janic Dionnet, Florence Cestac, Marie-Noelle Pichard, Keleck y Aline Issermann, Trina Robbins, Cecilia Capuana y Liz Bilj.

  • Fue una rompedora revista de corte feminista que tenía la particularidad de estar dibujada solo por mujeres (salvo un hombre como artista invitado a cada número), en una sátira de la proporción imperante en las publicaciones de la época.

    Presentaba historias escritas y dibujadas exclusivamente por mujeres, con temas de interés para las mujeres como la menstruación, el sexismo, el aborto… cada número era temático. Se publicó entre 1976 y 1978.

    En los 9 números que se sacaron, vendió 15.000 copias de una circulación de 30.000, antes de que la prohibición de las ventas a menores (por considerar las historietas como obra pornográfica) obstaculizara fatalmente su desarrollo.

    Pese a todo, fue cantera de mujeres artistas que consiguieron hacerse un hueco en la exigente industria francesa: Chantal Montellier (“1996”, “Andy Gang”, “Julie Bristol”…), Florence Cestac (“Le Demon de Midi”), Annie Goetzinger (“Aurore”, “Una chica Dior”…).


  • Sin embargo, no ha sido hasta la década del año 2000 que ha nacido una nueva generación de artistas mujeres en el mercado francés, y ha sido marcado por 4 momentos importantes que han favorecido esa creciente feminización del oficio de dibujante de cómics:

    • El primer factor fue el gran premio otorgado a Florence Cestac en el Salón de Angulema el año 2000. Hasta hoy sigue siendo la única mujer honrada con ese galardón.
    • El segundo fue el triunfo de “Persépolis”, la obra autobiográfica de Arjane Satrapi, que sirvió para abrir el camino de la libanesa Zeina Abirached o la india Amruta Patil, por ejemplo.
    • El tercer factor fue la explosión de la lectura de manga en Francia, que condujo a la traducción masiva de manga creado por mujeres para un público femenino.
    • Y el cuarto fue el lanzamiento, en 2002, de la colección “Traits féminines” en las ediciones de L’An 2 dirigidas por Thierry Groensteen. Desde aquí se han publicado muchas obras de artistas como Anne Herbauts, Jeanne Puchol, Sandrine Martin…
    CONTINÚA MAÑANA
Pioneras del cómic en España

3 comentarios:

  1. de las 5 "españolas" dibujantes de comic, las 4 primeras son catalanas. Son detalles que a los catalanes SI nos importan...

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    1. Jordi, ese aire de superioridad es un poco molesto. Quizá porque están cerca de Francia...

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    2. XDDDD quizás somos impertinentes los catalanes, es cierto, tampoco lo veo motivo suficiente para menoscabar nuestra identidad. Muchas gracias por el blog, gran trabajo!

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