domingo, 19 de mayo de 2024

Andrew Posada


En realidad su nombre fue Andrés Posada, un ilustrador norteamericano que murió en 2007 a la temprana edad de 37 años. Los artistas no deberían morir jóvenes, pues de esa forma privan de belleza al mundo.
“Drew” Posada fue conocido como uno de los coloristas digitales pioneros. Con su estilo de representación foto-realista, dotó de un cierto toque artístico cada libro en el que trabajó.
Si algo caracterizó las ilustraciones de Posada fue el increíble trabajo sobre el pelo de sus modelos y  el brillo casi metálico que consiguió darle a sus cuerpos.
Todo esto lo consiguió, al parecer, a través de un meticuloso trabajo en photoshop. Técnica para nada oculta, sino muy al contrario, lo hizo explícito mostrando sus dibujos en distinto estado de desarrollo o presentando "alternativas" con distintas ropas o con colores.
Más tarde dejó los cómics para seguir una carrera como pin-up artista. Recibió elogios y vendió su trabajo a través de Robert y Tamara Bane Gallery. Su arte  (reproducciones en grandes afiches) se venden junto a los de artistas de renombre mundial. 



En su biografía personal expresó: "Yo nací en 1969, como Andrés Posada, con mi hermano gemelo, Alejandro Posada. Fuimos criados en un hogar muy pobre. Alex y yo fuimos muy competitivos entre sí. Por ejemplo, ¿quién podía hacer el mejor dibujo y obtener el mayor reconocimiento de los adultos? No teníamos dinero para comprar equipos deportivos y juegos de vídeo, pero siempre habían lápices y papeles.


Admiró y aprendió del arte de Hajime Sorayama y Olivia de Berardinis, pero creo que su trabajo fue superior. Se graduó de la escuela secundaria en el oeste de Seattle en 1987, donde recibió su instrucción artística de un maestro llamado Phillip Bradshaw. “Él no me enseñó la historia de la técnica o el arte, él me enseñó a ver", expresó.


Sabias palabras de un artista que nos ha dejado muchos testimonios de su talento. El que quiera iniciarse en el mundo de las artes plásticas y del realismo, antes de crear, debe aprender a copiar y a ver.


















La prematura muerte de artistas talentosos como Posada nos recuerda la importancia de preservar y valorar el arte que enriquece nuestras vidas.

1 comentario:

  1. Cuanta belleza en las imágenes de esas sensuales mujeres. Humanas y no humanas.
    Las técnicas están muy usadas. Que arte.
    Lástima que murió joven.

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